lunes, 20 de septiembre de 2010
Estupideces de mi vida: Políticamente (in)correcto
lunes, 13 de septiembre de 2010
Estupideces de mi vida: I'm addicted
Ya he hablado en alguna ocasión que si nos preguntasen ¿para qué sirve Facebook? Difícilmente sabríamos qué responder, y de hacerlo sería con argumentos que no convencerían a nadie, y posiblemente nosotros mismos nos sorprenderíamos (a mi me ha pasado) de ver que estamos enganchados a algo sin saber porqué… las posibles respuestas pasan por:
- Para cotillear: Al menos somos sinceros.
- Para ver como han envejecido nuestros compañeros de escuela: A todo el mundo le sienta bien ver que está mejor que los demás, lo malo viene si los demás están mejor que tú.
- Para darle a “me gusta” cuando alguien pone que le ha pasado algo malo, como por ejemplo “mi coche siniestro total” o “no era un resfriado sino gripe aviar”.
- Para estar en contacto con los amigos: Seamos sinceros, los tienes en tu lista y ni tan solo habláis, ya lo flipo cuando veo perfiles con cientos de amigos, o como el otro día, uno con más de 4900 amigos. Sin comentarios.
- Para ligar: ¿Qué me he perdido?
- Por los juegos: Ahí quería yo llegar.
Recuerdo cuando acepte la invitación para jugar a Farmville, aquel recuadro grande y verde, con 6 cuadritos marrones donde plantar algo y empezar a ganar dinero, berenjenas y fresas era lo primero que uno podía recoger allí… Recuerdo la primera casa, los primeros animales sueltos que corrían por allí… y ahora, después de pasar por varias casas, tiendas, granjas, establos, pocilgas, una torre Eiffel, gallineros, vallas, árboles, una torre de Pisa, una pagoda oriental, un jardín zen, molinos, un Stonehenge y varias expansiones del recuadro principal… aquello es todo un poblado. Un poblado en el que no cabe prácticamente nada, y en el que estoy seguro que mi granjero se acuerda de todos mis antepasados cada vez que lo mando a algún lugar del pueblo a hacer algo porque el pobre no debe saber por donde pasar y muchas veces lo hace a distancia, que suerte que tiene telepatía, que si no habría cogido una baja por estrés o por romperse una pierna saltando algún muro.
Ya hace tiempo que me voy dando cuenta de hasta qué punto estoy enganchado, y es que no es difícil darse cuenta, simplemente lo sabes cuando...:
- Vas por la carretera y al ver un campo lleno de maíz exclamas “Harvest!!” y te lanzarías en mitad de las mazorcas esperando que te saliera la línea verde encima de la cabeza e ir recolectándolo todo.
- Cuando ves cualquier tipo de animal y piensas que no está a punto para recolectar nada porque no tiene el triangulito rosa encima de la cabeza.
- Ves una pagoda o un molino y piensas “mira, como los del Farmville”.
- Cuando te hablan del año de construcción de la torre de Pisa o la Eiffel piensas “ah, pero esto no es una reproducción a partir del juego?”
- Encuentras en la nevera algo podrido y piensas automáticamente en comprar el spray que lo devuelve a su estado natural.
- Imaginas, mientras pones gasolina, que qué lástima no poder usar uno de los más de 500 tanques que tienes en el juego.
- Ves una abeja y piensas en seguirla hasta su panal y secuestrar a su reina para completar así el tuyo en el juego.
- Pegas sustos a la gente levantándote de golpe mientras estáis tomando algo y cuando te preguntan que qué pasa tu les sueltas “coño! Que había plantado tomates de 8h esta mañana! Se me habrá podrido todo!”
- Si acto seguido a lo anterior recoges tus cosas y sales volando al grito de “voy a ver si con suerte llego a tiempo a recogerlo!!!” entonces ya es que estás fatal.
- Abres la nevera y al ver los huevos quieres romperlos a ver qué te ha tocado.
- Llamas a tus amigos granjeros sólo para decirles que vas a publicar algo en el muro.
- Cuando estás en tu casa rebuscando en armarios, cajones, etc, piensas “a ver si me sale algún collectible de los que me falta…”.
- Eres capaz de irte a dormir tarde aunque te mueras del sueño simplemente porque calculaste mal la hora en que tus tierras darían frutos.
- Al ver un camión de cerdos en la carretera piensas que a ver si hay suerte, alguno encuentra trufas y te las publica en tu muro.
- Al ver en la tele alguna granja piensas en si la tienes añadida como vecina.
- Te abres más perfiles de facebook sólo con la idea de poder mandarte regalos al principal y así tener más cosas.
- Tienes un fondo de pantalla como el que os pongo aquí debajo, no me digáis que no es genial:
En EEUU donde siempre van por delante tienen cosas como…
Tiendas de productos naturales como si fueran de las granjas del juego:
O helado de Farmville, en el que puedes encontrar códigos en el dorso que después cambias en una web por regalos:
Por otro lado, si Farmville os absorbe de tal manera que no queréis perder ni un minuto comunicándoos con vuestra pareja, y mucho menos en otros menesteres, siempre podéis compraros esta camiseta:
Próximamente es mi cumpleaños, igual me pido esta tarta:
Y si vuestro amor por Farmville es tan profundo y sois unos románticos como Pipi Estrada, siempre podéis hacer como él… ¿tatuaros el nombre de Terelu? No, algo más acorde con vuestra adicción, algo como esto:
miércoles, 8 de septiembre de 2010
Estupideces de mi vida: He visto la luz.
Pero esos tiempos de terror y oscuridad pasaron, bueno los de oscuridad, los de terror no, que la tienda sigue abierta, y hace unos días al abrir la persiana por la noche un resplandor inundó el salón, yo no sabía si era el fin del mundo, si es que yo estaba viendo la luz al final del túnel o si el edificio ardía, salí al balcón y vi como toda la calle estaba iluminadísima por 4 farolas nuevas que daban una luz que para los que vivan en los bajos y los primeros pisos más que luz, será una putada.
Pues bien, os paso a transcribir una conversación real que oí el otro día al salir de casa. Iba yo por la acera y delante tenía a una pareja que viven varias casas más arriba e iban hablando con otra pareja que les acompañaba:
Vecino: Ay! Os habéis fijado que nos han cambiado las farolas de toda la calle!!
Vecina: Es verdad! Casi se nos olvida decíroslo!! Mirad que bonitas son… son de diseño eh… mirad mirad, bonitas bonitas de verdad!! Y dan una luz… se ilumina toda la calle!!!
Los otros 2: Uy sí que son bonitas sí… preciosas!!!
Vecino: Si, la verdad es que la calle ha mejorado un montón con estas farolas, esto revaloriza un montón las casas y los pisos de la zona, porque ahora sales al balcón por la noche y te dan ganas de salir y pasear por la calle, es que dan ganas de verdad, de salir, de pasear, de disfrutar de la calle entera…
Aquí puede haber dos posibles: El primero es que yo sea un insensible a las más mínimas cosas (y a las grandes también), que no entienda nada de arte, menos aun de diseño urbano; y el segundo que realmente la gente sea así de gilipollas como yo llevo años manteniendo.
¿Tan fea es su casa que tienen que mostrar a sus invitados las farolas de la calle? La tía va y dice “casi se nos olvida decíroslo”, vamos que si se van y cae en la cuenta luego les llama y todo para contárselo…
¿De diseño? Vamos os pongo foto y todo, os vayáis a pensar que son ultramodernas, rococós, o que llevan trajes regionales simulando las diferentes comunidades autónomas… nada de eso, farolas grises normales y corrientes, vamos que hay lámparas en los contenedores con más diseño.
“Y dan una luz… se ilumina toda la calle”, vamos, lo que viene a ser una farola, que las hacen para eso!! Lo raro sería que la farola te ayudar a aparcar, o te despertara por la mañana a modo de despertador, o que te avisara cuando se te pasa el ticket de la zona azul pero diría yo que el que una farola ilumine la calle no tiene nada de extraño.
Tengo la esperanza, la estúpida esperanza, de que los otros dos les siguieran el rollo con lo de que eran preciosas… pero como digo es una esperanza estúpida porque por el tono de voz que ponían lo estaban viviendo tanto como los otros dos…
Y llegamos a lo que interesa, las farolas han revalorizado las viviendas de la zona, vamos que yo estoy por cambiar los anuncios de Internet de la venta del piso y ponerlo como “zona de alto standing” y pedir por él no menos de 1 millón de euros.
Lo único que encuentro coherente es lo de que te dan ganas de salir a pasear por la calle de noche, viendo a su mujer e imaginándola sin maquillar, en bragas (con suerte con un camisón encima) y encima de la cama, y a mi me darían ganas hasta de hacer el camino de Santiago y reemprenderlo al acabar…